Como virtuoso del sonido, estoy constantemente buscando el sonido perfecto. Cuando era estudiante, trabajé en una tienda especializada en instrumentos musicales. Entre bastidores, mantenía interesantes conversaciones con fabricantes y músicos y tenía acceso a los mejores productos. Me pasaba los fines de semana de gira con mis grupos o en nuestro estudio, en la sala de la batería: techos de altura ajustable, paredes especiales con absorbentes acústicos, y más de 20 micrófonos específicos para baterías y de ambiente. Con «SubKick» he creado un micrófono que capta el rango dinámico y las bajas frecuencias propias de un bombo.
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Los Beatles fueron precursores del concepto del micrófono subkick.
El subkick se introdujo en 1966 al grabar el sonido del bombo de la canción «Rain» de los Beatles. Gracias a su gran diámetro, el micrófono capta frecuencias extremamente bajas, por debajo de los 50 Hz; ideal para una transmisión bien equilibrada de las frecuencias más graves.
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